De los resultados del Frente Amplio en el distrito 8 se desprende la necesidad urgente de unidad de la centroizquierda, opina el precandidato a diputado del PRO Alexander Aranguiz.
Por Alexander Aranguiz*.
A casi un mes de las primarias presidenciales es momento de hacer un balance de nuestro distrito 8, que incluye las comunas de Maipú, Pudahuel, Quilicura, Colina, Lampa, Til, Estación Central y Cerrillos. Sin ir más lejos es el segundo distrito más grande de Chile, por ello la importancia de su votación y comportamiento electoral.
El Frente Amplio (FA), que en los últimos días se ha mostrado reticente a realizar un acuerdo en una posible segunda vuelta, está cada vez más ciego. No quiere asumir que el costo de la decisión del electorado de centroizquierda y de izquierda podría llevarnos a un gobierno de corte conservador.
Nadie puede solo, esos tiempos pasaron en la historia de Chile. Rememorando campañas como las de 1958 y 1964, hoy en día es necesario un gran acuerdo nacional de todas las fuerzas de izquierda, para poder lograr primero un parlamento acorde a los cambios que vienen.
Recordemos que este año el número de diputados a nivel nacional a elegir es de 155 y no los 120, por tanto para alcanzar mayorías es necesario, primero, buscar acuerdos; segundo, buscar puntos de afinidad, como el fin del lucro, las AFP, pensiones, sueldo mínimo, Constitución, etc.
Por otro lado, nuestro distrito elige con el fin del sistema binominal, herencia marcada por la dictadura cívico-militar —recordemos que nuestro distrito tiene por diputado a quien fuera alcalde designado por la misma durante 5 años en Pudahuel, y hoy lleva 27 años como diputado—, 8 diputados en total, con un sistema de representación proporcional.
El FA, sin ir más lejos, solo obtuvo a nivel de distrito 27 mil votos, 2,8% del padrón total del distrito, muy por debajo de lo que se necesita para lograr un parlamentario si consideramos el universo de votantes que son 950 mil, donde en primarias fue prácticamente cuadruplicado por Chile Vamos. Ninguno de los dos candidatos de FA logró obtener la votación de quien obtuvo el peor resultado en la derecha.
De acuerdo a los resultados obtenidos se puede deducir dos cosas: que el FA tocó techo con su votación, después de ello no crecerán más; la necesidad de unidad para lograr revertir el avance de ideas conservadoras y la representatividad de nuestro distrito es urgente.
Como PROgresistas hemos convocado a todos a la unidad, recogiendo el llamado de que las fuerzas de centroizquierda deben confluir en procesos que permitan un entendimiento en segunda vuelta, a su vez también en la conformación del parlamento.