Un hombre identificado como Juan Gabriel Trabol, de 32 años, fue detenido el jueves 26 de diciembre tras una seguidilla de robos violentos en la zona occidente de Santiago, en comunas como Estación Central, Cerrillos y Maipú entre los lugares más afectados.
Actualmente se le acusa de cometer al menos 12 atracos a la cadena comercial «OXXO» con un botín que supera los 30 millones de pesos.
Pero el actuar delictivo de Trabol o «Antony» como se hacía llamar, no era desconocido para la Policía de Investigaciones (PDI):
“Premunido de armas cortopunzantes, linternas con electroshock y también gas pimienta, intimidaba a las víctimas y también las amenazaba de muerte. Se estableció que realizó este delito en doce ocasiones en estos locales comerciales. Y el perjuicio es por alrededor de treinta millones de pesos”, detalló el comisario Roberto Villarroel de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de Cerrillos.
En su más reciente intento de robo, ocurrido en una tienda frente a la plaza de Maipú, Trabol ingresó a robar una vez más, pese a que habían bajado las cortinas metálicas para que no pudiera hacerlo, pero fue sorprendido por vecinos y transeúntes, quienes lograron frustrar su huida en una masiva detención ciudadana.
El golpe final a su carrera delictiva fue posible gracias a la rápida coordinación entre vecinos y el equipo de seguridad de la tienda, quienes alertaron a la policía mientras mantenían retenido al individuo.
Desde OXXO Chile, cadena afectada por los robos, informaron que han colaborado de forma constante con las autoridades locales, municipios y fuerzas policiales para facilitar la investigación. “Seguiremos colaborando para aportar a la investigación que actualmente se encuentra en curso”, aseguraron en un comunicado oficial.
El electroshock utilizado por Trabol, incautado durante el operativo, fue identificado como un arma peligrosa, capaz de causar graves daños a la salud, incluyendo arritmias severas y paros cardiorrespiratorios, según expertos.
Tras su formalización por el delito de robo con intimidación, el Tribunal decretó prisión preventiva para Trabol, considerado «un peligro para la sociedad».
