Hace algún tiempo Viviana Delgado me pidió una fotografía que hice durante el lanzamiento de su pre candidatura a la alcaldía de Maipú como independiente por los verdes, en la plaza Monumento.
“Me representa completamente”, añadió, luego de que le había dicho que sí.
Como el plano es tan cerrado, habría que atenerse mayormente a la mirada para saber quién es Viviana Delgado.
Veo una mirada personal pero no individualista. Una mirada no solo al horizonte sino que a un horizonte deseado: pareciera que le gusta el porvenir, del que ella es protagonista.
No se podría hablar de un horizonte “soñado”, porque Viviana Delgado es una mujer que realiza acciones “concretas”, como se dice, dirigidas a resultados rápidos.
Se ha visto su lucha contra la minería ilegal en la Quebrada de La Plata (al poniente de la comuna), en su oposición a la curtiembre que se instaló hace un par de años cerca del “cruce de Maipú”, en su liderazgo en el movimiento No al oleoducto de Sonacol en Maipú, etc.
Aunque el gobierno autorizó el oleoducto la minería, en efecto, se terminó; en el caso de la curtiembre, se instituyó un comité ciudadano de seguimiento.
Esta vecina de Maipú ha sido dirigenta social desde antes, pero en la comuna desde que llegó hace dos décadas: presidenta de la Junta de Vecinos Pehuén IV y V, presidenta del comité de medio ambiente del Cosoc, etc.
Es de esas dirigentas sociales que van a todas. O sea que asume que en cada trinchera se juega el todo.
—Porque Chile cambió y necesitamos líderes desde las bases, gente que viva los problemas reales y no venga de paseo a Maipú. Es el momento de que la ciudadanía de a pie comience a dirigir las cosas. Es nuestro tiempo, el tiempo de las vecinas, que hemos visto cómo despilfarran el dinero y se sirven a sí mismos en vez de cumplir con su trabajo.
—Te puedo hablar de mí. Soy dirigenta social desde mi adolescencia, quiero a mi comuna y no es algo que haya improvisado en los últimos meses porque soy candidata. Me siento parte del Maipú de verdad, pertenezco al tejido social de la comuna. Soy una luchadora más, que quiere dirigir el gobierno local, con el conocimiento y la sabiduría de cómo es la vida barrial, lo que es atravesar media ciudad para estudiar o que las alcantarillas se te rebalsen o el agua se apose fuera de tu casa por falta de mantenimiento.
—Una cosa más: quienes me apoyan no votaron por el llamado Acuerdo de Paz ni tampoco por criminalizar la protesta social.
—La clase política que nos ha gobernado por demasiados años. Fíjate la cantidad de dinero que tiene como presupuesto nuestra comuna, más de cien mil millones de pesos, y ¿dónde están las obras?, ¿dónde está el beneficio para la gente común? Pasa que la municipalidad se convirtió en la casa del pituto político, por eso nosotros promoveremos la contratación por concurso público de la mayoría de los cargos claves.
—En esa misma línea, necesitamos un desarrollo de la economía equitativa justa y sostenible, partiendo por la comuna. Más asociatividad, más cooperativismo, un respaldo a las PYMES agrícolas de la comuna y un circuito de compras sustentables.
—Si logramos cambiar la base de cómo se gobierna esta comuna podremos afrontar los problemas más urgentes, como rescatar nuestra agua municipal, hoy abandonada por la municipalidad, llevar el gobierno municipal a los barrios y dar espacios de participación. La gente sabe más de lo que la mayoría cree, debemos confiar más en nuestras vecinas, nuestros vecinos.
—Prometer es fácil, pero cuando lleguemos a la alcaldía lo primero será ver el estado financiero de la municipalidad. Para eso haremos una auditoría externa.
—Nuestra comuna tiene enormes problemas de conectividad, la falta de inversión en el Camino a Melipilla tiene con los nervios de punta a los habitantes de El Abrazo, la Villa San Juan, la Ciudad Satélite; la Autopista del Sol nació congestionada, y por ahora solo sirve para engrosar los bolsillos de la concesionaria, pocas soluciones efectivas para los residentes y usuarios del sector poniente de la comuna. Pajaritos cada vez con mayor cantidad de edificios, que arrojan una enorme cantidad de vehículos a la calle, todo ello genera congestión vehicular atroz.
—Ya he pedido a un grupo de colaboradores que comiencen a estudiar los alcances de la Ley de Aportes al Espacio Público, es necesario invertir en mejoramiento vial de la comuna. Y los recursos para construir ciclovías tendrán prioridad, con un diseño que comprenda la participación ciudadana, principalmente con los usuarios organizados de este medio de transporte.
—Haremos una Casa del Dirigente Social, que será un lugar de encuentro, capacitaciones y trabajo para líderes comunitarios de nuestra comuna. Queremos que sean los protagonistas de nuestro gobierno.
Independiente
Apoyada por el Partido Ecologista Verde
Dirigente social y ambientalista. Su siguiente desafío: ser la próxima alcaldesa de Maipú.
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