
El desalojo del campamento El Trébol iniciado la mañana de este martes 16 de diciembre, no es un hecho aislado. Se trata de la primera etapa de un plan más amplio que busca erradicar de manera progresiva los cuatro campamentos que hoy conviven en el sector.

El operativo contempla entre tres y cinco días de trabajos para demoler y retirar las estructuras del asentamiento, que se emplaza sobre un terreno fiscal considerado de alto riesgo por la presencia de oleoductos, gaseoductos, tránsito pesado y descargas de aguas servidas.
El Trébol está compuesto por 110 familias, que representan cerca de 380 personas, de las cuales 150 son niños, niñas y adolescentes. Además, el 94% de las personas son extranjeras, en su mayoría venezolanos y colombianos y formaban parte de un sector donde convergen cuatro campamentos, sumando más de 600 viviendas informales en total.
El asentamiento El Trébol comenzó a conformarse en 2021 y los otros tres campamentos se formaron en distintos momentos: Vicente Reyes, levantado en 2007; Latinoamericano, desde 2019 y Santa Marta, instalado en 2022.

Según explica el alcalde Tomás Vodanovic más adelante, la intervención de esta semana corresponde únicamente a El Trébol, pero la planificación municipal apunta a avanzar por etapas en el resto del sector.

Durante la jornada se inició además el traslado de las últimas personas hacia un albergue municipal y el rescate de animales que permanecían en el lugar. El catastro previo identificó 76 perros y gatos, los que están siendo derivados a caniles municipales, hogares temporales y redes de adopción, con el objetivo de evitar el abandono durante el proceso.

Vodanovic se refiere al componente humanitario, los riesgos habitacionales y los arriendos transitorios a las personas desalojadas
Cerca de las 8:20 de la mañana de este martes, justo cuando comenzaban las primeras demoliciones, el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic, habló desde el campamento El Trébol para explicar el sentido del operativo que se inició a primera hora en el eje Camino a Melipilla con Avenida Los Pajaritos.
“Queremos que el sector quede al día por el municipio y que podamos tener, en lo posible, una jornada lo más tranquila y pacífica posible”, afirmó el alcalde, recalcando que la intención es recuperar completamente este espacio público, pero sin perder de vista el componente social y humanitario del proceso.
Vodanovic aclaró a los medios presentes que en este punto de la comuna confluyen cuatro campamentos distintos y que el desalojo de El Trébol es solo la primera etapa.
“Entendemos que junto con ordenar no podemos perder el componente humanitario y social. Lo que hemos buscado es hacer un proceso acordado con las familias, con un importante apoyo por parte del municipio, que no sea traumático para nadie”, sostuvo.
El alcalde además fue enfático en señalar los riesgos del lugar:
“Este es un sector que no reúne ninguna condición para que habiten familias. Aquí se afecta la seguridad de los vecinos, pero también la de quienes viven acá, especialmente niños y niñas”, dijo.
En ese contexto, detalló que el operativo fue trabajado con anticipación y contempla medidas especiales, como la desenergización del sector, coordinación con canalistas para bajar los caudales, y la presencia del Instituto Nacional de Derechos Humanos, la Oficina de Protección de la Niñez y equipos de protección animal.
Respecto al apoyo a las familias, Vodanovic indicó que aquellas con niños, adultos mayores o personas en situación de discapacidad recibieron un subsidio de arriendo transitorio, gestionado y pagado directamente por el municipio a los propietarios. Además, se ofreció traslado de enseres, regularización de niños en situación irregular y hogares temporales para mascotas. Para quienes no se trasladaron previamente, se habilitó un albergue municipal en el Estadio Bueras.
El alcalde adelantó también que la intervención continuará de manera paulatina en los otros campamentos del sector.
“Nuestra idea es que esta sea una etapa de varias. Ojalá en marzo o abril podamos avanzar con Santa Marta y seguir hasta recuperar todo el sector”, señaló.
Gonzalo Durán y la coordinación del operativo
Desde el Gobierno, el delegado presidencial metropolitano, Gonzalo Durán, respaldó el operativo y lo enmarcó en una política regional de recuperación del espacio público.
“Se trata de terminar con asentamientos irregulares que generan graves afectaciones a la ciudad, a las propias familias y, en algunos casos, facilitan incivilidades y delitos”, afirmó.
Durán destacó el trabajo coordinado entre el municipio y los servicios del Estado, asegurando que el retiro se realiza con preocupación por la dignidad de las personas y con resguardo de sus derechos. Además, confirmó que, debido a la planificación previa, se avanzará de inmediato a una segunda etapa del campamento. “Queremos ojalá, antes del 11 de marzo, avanzar en más etapas de este sector”, dijo.

En materia de seguridad, Carabineros desplegó un operativo de gran escala. El coronel Jorge Julián Salas, prefecto a cargo, informó que hay más de 480 efectivos en el lugar para dar cumplimiento a la resolución administrativa y resguardar a los equipos desplegados.
“El servicio está planificado entre cuatro y cinco días, pero con el avance de hoy creemos que puede ser menos”, señaló, agregando que el procedimiento se ha desarrollado “con total normalidad”.
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