Invitan a niñas y jóvenes a incorporarse a la Selección de Vóleibol de Maipú, desde los 9 años

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Texto de Sergio Benvenutto.
Fotografías de Estefanía Henríquez.

efodemvoileibolmaipu@gmail.com

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Son las coordenadas para quienes deseen obtener mayor información sobre la Selección de Vóleibol de Maipú.

Que este año, y en este minuto, está reclutando a niñas y jóvenes interesadas en este deporte, desde los 9 hasta los 16 años.

Las jornadas de entrenamiento son rigurosas, y se realizan los lunes, martes y jueves de cada semana, de 20:00 a 22:00 hrs., en el Polideportivo Martín Vargas (Tres Poniente con San José).

El cuerpo técnico lo componen el preparador físico, Roberto Hormazábal, Rodrigo Mella, encargado de la Sub 19, y Melissa contreras, encargada de la Sub 15.

En conversación con La Batalla, esta última reveló que al momento de recibir a las muchachas se atiende especialmente a su estatura, «y lo otro es ser altamente comprometido con la responsabilidad que implica jugar en una selección, y ser bien aguerridas. Tienen que ser chicas jugadas».

En todo caso, «si llega alguien preguntando, le damos la acogida respectiva, le explicamos el objetivo de esto, que es llegar a competir representando a la comuna. Con períodos de prueba. Tienen que haber mejoras significativas en el aprendizaje técnico-táctico. Entonces, después de tres o cuatro meses, nosotros decidimos la constancia o no, para que siga entrenando».

Cuesta llevar adelante la idea de dotar a la comuna de un seleccionado, en tanto la municipalidad apunta -comprensiblemente- a la masividad. En todo caso, se está materializando a pulso, tanto respecto de esta disciplina como del básquetbol, el fútbol y el atletismo, merced del proyecto EFODEM, Escuela de Formación Deportiva de Maipú, impulsado desde el departamento de deportes de la municipalidad, por Ariel Salas.

En este caso al menos, los afanes del día en el ámbito burocrático apuntan a procurarse los elementos básicos para trabajar. Actualmente, dice Melissa Contreras:

«El vóleibol es de Plaza Italia para arriba: está Manquehue, Boston, Providencia, que son clubes formadores de jugadoras de Santiago. Entonces, qué pasa, que muchas jugadoras de Maipú, Pudahuel, Cerro Navia y Lo Prado, tienen que ir para allá si sueñan con jugar vóleibol».

«Desde el punto de vista físico, el vóleibol es un deporte altamente coordinativo -dice la profesora-. Eso significa que las jugadoras desde temprana edad aprenden a manejar el cuerpo en todas sus áreas. O sea, coordinaciones básicas, como atrapar, saltar, girar, son muy complejas ya de aprender, y es lo que se enseña en los colegios, en las clases de educación física. Pero estas mismas capacidades tú las tienes que enseñar aquí cuando el cuerpo está en el aire. Se nota mucha más complejidad, y agrégale el implemento del balón. Entonces, desde el área motriz, es muy complejo el aprendizaje, pero a la vez muy completo».

A este aspecto físico suma Contreras «el aspecto social: aprendemos a trabajar en equipo, aprendemos a asumir exigencias, aprendemos a ser responsables, aprendemos a cumplir con nuestros propios cargos. Porque en el vóleibol que nosotros utilizamos manejamos mucho las funciones, que hacen caer mucha responsabilidad en cada una de las jugadoras».

La mayoría de estas pertenecen a colegios del entorno de la Plaza Mayor: «Tenemos muchas alumnas del Liceo Mater Purissima, del Colegio Santa María, del de la Providencia, Alicante». Aunque también hay niñas de El Abrazo.

Para este año han formado tres categorías: la Sub 12, con niñas de entre 9 y 12 años 11 meses; la Sub 15, hasta los 14 años 11 meses, y; la Sub 19, dividida en Sub 16 y Sub 19.

«La idea, este año, es crear, desde la base, que son las niñitas chicas de la Sub 12, un nido de jugadoras, para que tengan un crecimiento dentro de la escuela», finaliza la profesora Melissa Contreras, quien se alista para inciar un recorrido por los colegios, difundiendo el proyecto.